Día 4 y 5: llegó el primer infectado después de un ridículo día de pampeaneidad al palo, se endurece el discurso y la crítica situación social que se agrava

Foto Belkis Martín

1.Y finalmente llegó el primer caso de coronavirus a La Pampa. Se trata de un hombre de Santa Rosa, de 71 años que visitó países como Dubái y España, y presentó síntomas el 20 de marzo, cuatro días después de haber llegado a la capital. Se encuentra con cuidados domiciliarios.

BIFE ya lo venía diciendo desde el primer día en este diario: “Todas las fuentes que atendieron a BIFE dijeron extraoficialmente que la mano viene de mal en peor. Que se preparan para “el peor escenario”. Esperan que estalle en el Conurbano, se escurra por Capital y viaje hacia todo el país. En La Pampa, se comenzarían a ver los primeros casos en abril. Se habla de muchos muertos”. No fue en abril pero era cuestión de tiempo, pese a la algarabía de los medios que impulsaban un ambiente festivo porque por el momento nuestros vecinos estaban infectados y nosotros no. Al día siguiente de esa irresponsabilidad, Ziliotto salió vía Skype a endurecer un poco su discurso o a ser medianamente realista, había dicho: “La pandemia, tarde o temprano, llegará”. Un balde de agua fría para los ingenuos. Hay 5 sospechosos más de tener el virus, se sabrá el resultado cerca del fin de semana, cuando estén los resultados en el Malbrán. Por eso, se anticipó que en 10 días se empezará a hacer análisis de coronavirus en La Pampa, y que ya preparan el Centro de Medicina Nuclear, con 19 camas de terapia intensiva, para recibir pacientes contagiados. Por otro lado, poco a poco, en consonancia con el gobierno nacional, el ejecutivo provincial, se va poniendo más duro en su accionar. Hasta el momento son 2 mil las causas penales por violar la cuarentena, y un funcionario eyectado de su puesto en el Ministerio de Producción (quien además iba ebrio).

2.Como era previsto, la situación de los barrios “periféricos, al quinto día de cuarentena, es crítica. Hay malhumor y malestar. Más allá de incrementos en las partidas de la tarjeta alimentaria y otros programas, según informan fuentes del gobierno, están realizando operativos casa por casa para la entrega de viandas, sobre todo en los domicilios de los niños que comían en las escuelas, hoy suspendidas. Laura Galarza, del comedor “Los Amigos Solidarios”, en comunicación con BIFE, dijo: “Lloramos junto a las madres que tienen que decidir si darle de comer al almuerzo o la cena a sus hijos”, y “la asistencia que recibimos es insuficiente”. ¿Hasta cuánto podrá aguantar una familia precarizada la cuarentena? Es, naturalmente, un problema que está ocurriendo en cada rincón del país, y de los países que están en cuarentena.