La Jefatura de Policía resolvió apartar de su cargo al jefe de la División Toxicomanía de la Unidad Regional II, Comisario Inspector Martín Portillo, tras un grave incidente ocurrido durante una práctica interna.
La medida fue adoptada el lunes y se inició una investigación administrativa a cargo de la Fiscalía de Investigaciones Administrativas (FIA), en cumplimiento del protocolo institucional.
El hecho, considerado de extrema gravedad, se produjo el pasado 5 de abril, durante una capacitación en la que un efectivo policial realizaba una demostración técnica frente al personal del área. Según trascendió, el jefe interrumpió la práctica, ejecutó una maniobra con violencia y habría golpeado al agente con un arma en la zona abdominal. Luego, al caer la víctima, el jefe habría continuado la acción impactando con ambas rodillas en su espalda.
Las consecuencias físicas fueron severas: el policía fue internado tres días después en la Clínica Argentina con una lesión importante en el estómago y una afección en la columna que motivó su baja laboral.
También trascendió en las últimas horas, que el jefe policial se habría presentado en el centro de salud, no para interiorizarse sobre el estado del efectivo, sino para presionarlo con el objetivo de que declarara que las lesiones fueron producto de un accidente ajeno al entrenamiento. El episodio, presenciado por personal de salud y otros pacientes, generó un fuerte rechazo.
Hasta el momento, no se ha radicado una denuncia formal por parte del policía agredido. No obstante, la Fiscalía de la Segunda Circunscripción Judicial aguarda los resultados del sumario interno y el informe correspondiente para evaluar una eventual intervención judicial.