La Universidad de Buenos Aires (UBA) informó este miércoles la suspensión de la emergencia presupuestaria declarada el 10 de abril en respuesta a los recortes en la educación pública impulsados por el gobierno de Javier Milei. La decisión fue resultado de un acuerdo alcanzado con el Gobierno nacional para actualizar su presupuesto, tomada durante una reunión del Consejo Superior de la UBA. “No aceptamos que haya estudiantes de primera y segunda”, expresó en un contudente comunicado el Consejo Interuniversitario Nacional, al informar que en el resto de las universidades no hubo aumento de partidas para los gastos de funcionamiento.
El acuerdo informado por el Consejo Superior de la UBA incluye una actualización interanual del 270% para los gastos de funcionamiento de la universidad y del 300% para los hospitales universitarios. Según señalaron a través de un comunicado, la inyección de fondos permitirá una planificación presupuestaria viable. De igual forma, las autoridades universitarias advirtieron que las sumas “siguen siendo insuficientes para cubrir todas las necesidades de la institución”.
Más allá de la situación de la UBA, la disputa por el financiamiento universitario continúa en el resto del país. Otras instituciones de educación superior -ya sea del AMBA o del interior nacional- no alcanzaron ningún arreglo con las autoridades y reclaman que se les transfiera el mismo nivel de fondos que la Universidad de Buenos Aires recibió.
Así lo comunicó el Consejo Interuniversitairo Nacional, en el que se detalla que “es inadmisible que se actualice el presupuesto solo para una universidad”. El CIN exigió “un incremento igual” para todas las universidades públicas del país: “No aceptamos que haya estudiantes de primera y segunda”.