Un vecino de Toay que buscaba el perro que se había extraviado en un campo al este de la ciudad, se encontró con un pequeño ataúd tipo urna semienterrado entre los pastizales del monte.
El hallazgo fue dado a conocer por el historiador Pedro Vigne. El cajón, de moderna factura, se encontraba en perfecto estado y no tenía nada en su interior.
Vigne señaló que “se dio aviso a la Policía local que esta mañana concurrió al lugar y verificó que el ataúd es moderno, de los que se usan actualmente, se encontraba en perfecto estado con manijas y demás elementos”.
El historiador, quien acompañó a los efectivos que concurrieron al lugar, precisó que el ataúd “estaba con la base hacia arriba, así que al darlo vuelta se desprendió la tapa y pudo verse que no había nada en su interior. Las hipótesis son varias, pero lo más probable es que alguien haya arrojado las cenizas de un familiar y dejó el cajón tirado allí. No obstante se investigará a quien pertenece y si efectivamente ha sido así, ya que el responsable del predio desconocía el hecho”.