Un robo ocurrido en la zona de Churrinche y Ávila, en el barrio Mataderos, derivó en una investigación que permitió identificar y detener preventivamente a un hombre de 45 años, sospechoso de cometer delitos junto a su pareja, utilizando como señal distintiva una bolsa de tela marrón de grandes dimensiones.
BIFE pudo constatar que el último viernes un ciudadano denunció que le habían sustraído el celular tras bajarse brevemente del auto para saludar a un amigo. Al regresar, su teléfono ya no estaba.
Según le informaron testigos del lugar, una pareja —un hombre de aproximadamente 45 años y una mujer de 40— había sido vista merodeando la zona minutos antes del hecho.
Según pudo saber BIFE a través de fuentes policiales, las cámaras de seguridad resultaron clave: “En las imágenes se observa a la pareja caminando con una bolsa marrón que habría sido utilizada en otros hechos similares”, confió a este medio una fuente de la Sec. Primera.
Horas más tarde, cerca de las 19, el sereno de una obra en construcción alertó a la policía tras ver a un sujeto con la misma descripción ingresando al predio. Al ser sorprendido, forcejeó con el sereno y logró escapar, pero dejó atrás la bolsa marrón, reforzando aún más la hipótesis de que se trataba del mismo sospechoso.
BIFE supo que dentro del bolso se hallaron elementos presuntamente robados, entre ellos alambres y herramientas, por lo que también se lo imputa por tentativa de robo.
Con esa información, se solicitó un allanamiento en una vivienda ubicada en el Pasaje Olguín, donde ambos sospechosos fueron identificados. Tanto el hombre como la mujer tienen antecedentes penales.
Ella fue notificada en libertad, mientras que él quedó detenido con prisión preventiva.
Además del hurto del celular, la fiscalía le atribuye al imputado otros hechos en investigación y no descarta que haya más víctimas que aún no hayan realizado la denuncia.


