La CGT confirmó que el 18 de diciembre volverá a ocupar las calle en una movilización en rechazo a la reforma laboral que impulsa el Gobierno Nacional, a la que califica como un proyecto “regresivo” que recorta derechos y altera el equilibrio laboral vigente.
La convocatoria forma parte de un plan de lucha escalonado, con “medidas graduales” que la central analiza activar en las próximas semanas.
La CGT cuestiona con dureza varios puntos del proyecto oficial: el Banco de Horas, la posibilidad de extender jornadas hasta 12 horas, modificaciones en el esquema de vacaciones y restricciones al derecho a huelga en servicios esenciales.
Según la central, estas medidas violan el artículo 14 bis de la Constitución, que garantiza la protección del trabajador y la actividad sindical.


