En las últimas horas, la justicia rionegrina dispuso la detención de Pablo Parra por el asesinato de Agustina García. Después de cinco meses de investigación, el vecino y amigo de la pampeana -apuntado desde un primer momento por la familia de la víctima-, será acusado por femicidio.
En comunicación con BIFE, Martina, amiga desde muy pequeña de Agustina, relató como reaccionó ante esta novedad. “Apenas me levantes vi la noticia en muchos medios y se me llenaron los ojos de lagrimas”, dijo notoriamente emocionada.
A su vez, Martina sostuvo que es un “alivio” saber que Parra fue detenido. “Siempre pensé que él era sospechoso, no me gusta hablar del caso, soy la menos indicada, pero, en mi cabeza siempre trate de armar un caso basado en lo que se publicaba y siempre apuntaba a el. No tenía dudas”, manifestó la joven.
Consultada por la relación que Agustina mantenía con Parra, Martina contó que le había preguntado a su amiga cómo se relacionaba con el entorno del complejo que habitaba, teniendo en cuenta que Agustina era muy sociable y se había establecido sola en Río Negro para cursar la carrera de Medicina.
“A él -por Parra- me lo mencionó un par de veces, al principio bien, después fue contándome algunas actitudes que tuvo que a ella no le gustaron”, señaló Martina.
Por último, La joven amiga de toda la vida de Agustina, dijo que a pesar del tiempo transcurrido y luego de meses sin detenciones, nunca pensó que el caso no avanzaría. “Estamos cada vez mas cerca, nos quedaremos sin voz de tanto gritar y pedir justicia, pero la vamos a tener”, cerró.
El sábado 2 de julio a la tarde, Parra declaró que dejó sola en su departamento a Agustina y se fue a comprar helado. También dijo que pasó por la casa de su papá. Se ausentó por espacio de dos horas y en esas circunstancias alguien ingresó al inmueble y la atacó salvajemente. Murió en el hospital esa misma semana luego de que se confirmara que no tenía actividad cerebral.


