Con un Messi ausente, desaparecido del campo de juego y sin hacerse cargo del partido, Argentina perdió contra Arabia Saudita y las chances de no clasificar en primera ronda desde 2002 son altas.
El seleccionado de Scaloni cayó por 2 tantos contra 1, ante un rival que fue mucho más astuto.
El equipo argentino se puso en ventaja en el marcador y terminó el primer tiempo ganando por la mínima.
En la segunda parte, el conjunto árabe marcó rápidamente como consecuencia de una perdida de Messi en mitad de cancha.
A los minutos, Arabia Saudita dio vuelta el partido y puso el 2-1. A partir de ahí Argentina no tuvo generación de juego, sólo centros que los 11 de Arabia pudieron resolver sin mayores complicaciones.
El capitán y símbolo de la albiceleceste estuvo ausente del partido. No pudo generar acciones de peligro durante los casi 110 minutos que se jugaron. Ahora, la clasificación a octavos es una icógnita.


