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Mauri Ponce: “Los Questo Quelotro son como los Rey Momo, pero mejorados”

El guitarrista santarroseño de la vieja escuela vive su mejor momento al frente de tres proyectos. “Hago lo que quiero hacer”, asegura. Además, hablamos del choque generacional que se produjo al integrarse a Questo Quelotro, una de las formaciones locales con más proyección. Rememora su experiencia a principios de los 2000 con Rey Momo y la decisión de instalarse con la banda en Buenos Aires antes de que exista el concepto de “Rock Pampeano”. Y no escapa al hablar del cambio de época en la movida santarroseña: “los Momos ni nos saludábamos con Alter Pop, había pica, pero hoy la actitud de todos es otra”.

By revistabife /

“Estoy en la mejor etapa musical de mi vida, haciendo la música que quiero hacer”, sentencia Mauri Ponce, de entrada, ni bien se le pregunta por su presente. Y tiene motivos para afirmar eso. El guitarrista santarroseño -ex Rey Momo-, forma parte de tres proyectos diversos, pero con similitudes: todos con objetivos y metas. Con Indio Brujo -la banda del “rock que le gusta a la gente”-, prepara lo que será el próximo disco luego de editar el EP “ll”. También se encuentra copiloteando ese híbrido sintético llamado Rayo Hunters con el que está en pleno proceso creativo para próximo material. Y, a su vez, vuelca su impronta en el quinteto que capitanea el rock pampeano dentro de la provincia: Questo Quelotro.

“Los Questo son como los Momos, pero mejorados” , dice Mauri, mitad en broma, mitad en serio. Lo cierto es que la banda que editó su último single “Actitug Artesanal” en diciembre 2020, comparte características con la formación que surgió a fines de los noventa y que fue punta de lanza de la movida santarroseña. “Yo les grabé el primer disco a los Questo, aún cuando no formaba parte de la banda, y ahí noté que me identificaba con ellos; en las métricas, el estilo… Había algo familiar”, explica Mauri, quien se sumó a la banda cuando Nico, el guitarrista línea fundadora de Questo Quelotro, emprendió un viaje a Centroamérica sin fecha de retorno. “Los chicos me llamaron para tocar y acepté. Enseguida vino lo del Pre Cosquín, y me sumé con ellos para tocar ahí, aunque debo decir que nunca me gustaron los concursos. Pero volver a viajar y tocar con los pibes fue genial”.

ellos están viviendo cosas que yo ya viví con los Momos. Creo que todos valoraron que pude aportar un poco de esa experiencia.

Uno de los desafíos era salir ileso del choque generacional que producía su llegada a Questo Quelotro -formación en la cual todos sus integrantes son sub-25-, sobre todo, porque el guitarrista no se sumaba solamente para ocupar un lugar vació y ejercer de “sesionista”, sino que llegaba para seguir acentuando el estilo del quinteto. ”Se dio que de entrada nos tocó viajar con la banda, y eso consolidó mi entrada a Questo. En los viajes compartis, te conoces de otra manera, y a pesar de ser distintas generaciones ellos están viviendo cosas que yo ya viví con los Momos. Creo que todos valoraron que pude aportar un poco de esa experiencia”.

A principio de los 2000, Mauri y el resto de los Rey Momo decidieron ir a probarse a Capital. Foguearse en escenarios y antros de de Ciudad de Buenos Aires en la idílica escena pre Cromañon. “Hicimos los bolsos y los cuatro nos fuimos a vivir juntos a Capital. Vivimos muchas cosas grosas. Al poco tiempo de instalarnos nos encontrábamos tocando junto a Zeta Bossio y muchas bandas que estaban sonando en el circuito de Bs As. Fue un flash que, por ejemplo, Taverna –mítico sonidista de Soda Stereo- nos hiciera sonido esa noche, y no lo podíamos creer”, remarca Mauri, recordando esos años donde los Momos se alzaron como representantes, de alguna manera, del incipiente rock pampeano. “Cuando lanzamos “Mucho Momo” (2005) nos empezaron a llamar de todo el país. Viajamos mucho y de esa manera pudimos suplantar el bajón de lo que fue el post Cromañon, porque se hizo imposible tocar en capital luego de eso”.

Los Momo regresaron a la ciudad de Santa Rosa en 2008, después de mantenerse activos en los escenarios porteños durante 6 años y con una extensa temporada en la que todos sus integrantes vivían bajo el mismo techo. “Vivíamos juntos, íbamos a ver un reci juntos, al parque también íbamos juntos. Todo juntos”, recuerda el guitarrista, y señala que además del desgaste natural de la convivencia, la falta de recursos para mantener en forma a la banda fue decisivo al momento de pegar la vuelta. “Yo vivía de dar clases. Una semana vivía acá y otra en Buenos Aires. Así durante dos años, con eso pagaba el alquiler. Llegó un punto que nos dimos cuenta que nos hacía falta guita para seguir con el proyecto fuera de Santa Rosa. Eso es algo que aprendí”.

-Hoy, probablemente Questo Quelotro sea la banda local que más “proyección” tiene para sonar fuera de la provincia, ¿te irías nuevamente con una banda a instalarte a otra ciudad como lo hiciste hace 20 años atrás con Rey Momo?

¡Ya me cagué de hambre muchísmo! (risas). No tengo problema en viajar todo lo que sea necesario, ir , tocar, volver. Pero hoy la realidad es otra. Creo que no es indispensable trasladarse a Capital para sonar fuera de acá. La maneras de difundir la obra de una banda ha cambiado muchísimo. Son otros tiempos.

Los Rey Momo, con el ruso de Alter Pop ni nos saludábamos, había pica, y ni él ni nosotros sabíamos por qué. Hoy la actitud es otra.

–Los tiempos no sólo han cambiado en las formas de producir y difundir material, también se nota otro tipo de relación entre los artistas y las bandas. Hay más solidaridad y ya no se nota una competencia tan marcada como si la había años atrás, ¿coincidís?

Sí, claro. Eso lo veo con los pibes, y también lo veo con los de mi generación. Muchos hemos cambiado, porque la verdad que antes había chicanas que jodían bastante. A los Momos nos decían que teníamos guita y no se cuantas otras cosas más. Y te puedo asegurar que no era así, es más, cuando estábamos en Buenos Aires invitamos a los chicos de El Rito y cuando llegaron y abrieron la heladera solo teníamos botellas con agua. ¡Tuvieron que salir ellos a comprarnos comida a nosotros! Esos señalamientos ya no los veo tan marcados, por suerte. No sé, mirá, los Rey Momo, con el ruso de Alter Pop ni nos saludábamos, había pica, y ni él ni nosotros sabíamos por qué. Hoy la actitud es otra.

–Otra de las caraterísticas de estos tiempos, y sobre todo de este último año, fue la virtualidad, ¿cómo te llevaste con la experiencia de tocar vía stream?

Haber hecho un show por stream con Questo Quelotro fue bárbaro, creo que todos lo disfrutamos mucho. Es indudable que no es lo mismo que tener al público cerca y poder sentirlo, y además con los Questo, en donde el vivo es muy importante para la banda. Pero la realidad es que las cosas se dieron así, a todos nos tomó por sopresa la pandemia. En lo personal también tuve que adaptarme a dar clases a través de una pantalla, y no me costó tanto porque pude desenvolverme de otra manera, mostrar más material y demás. Pero lo cierto es que como músicos necesitamos volver a tocar en vivo, seguir generando, retomar la actividad. Seguramente los recitales al aire libre serán los primeros en volver. Nosotros teníamos uno programado con los Questo y se suspendió. Fue un bajón. Espero que el contexto permita volver pronto a los escenarios.

Consumos pandémicos de Mauri Ponce

Algo de lo que estuvo escuchando, viendo y leyendo el guitarrista en los últimos meses

“Tom Mish es un soul funk, con mucho loopeo. Y Tiene mucha onda“

“Un remasterizado de John Lennon. Siempre me gustó Lennon y en estos meses me di el tiempo para volver a descubrirlo“

“Jakob Bro tiene otro concepto diferente a la guitarra clásica de jazz. Me inspira mucho. Me ha inpirado para tocar con mis proyectos. Lo considero una influencia. Es un estado de animo“