En el flyer realizado para lo que será su próxima visita a tierras pampeanas, Against se despachó con una versión criolla, argenta y bien corajuda de Eddie, la mascota icónica de Iron Maiden. Se trata de un gaucho flamenado la bandera argentina y preparado para hacerle frente con un facón a la peste que divisa en el horizonte. El gaucho de Against claramente cagaría a trompadas y dejaría escupiendo sangre en el piso a su némesis del imperialismo británico.
“Nos importa que nuestro discurso también se vea reflejado en la imagen de la banda. Hemos hecho desde el chancho hasta, por ejemplo, el cóndor matando al águila imperial”, dice Sebastian Radrizzani guitarra y voz de la banda que desde hace 14 años transita el sendero del metal.
Against tiene un par de medallas de peso colgadas en el cuello: Más de una década destacándose en la escena metalera nacional, teloneros de Megadeath, Gojira y Mastodon entre otros, dan cuenta que las cosas salieron bastante bien.
Marco el número de uno los dos Radrizzani que integran el cuarteto mientras viajan rumbo a Santa Fe a un show. “Estamos en ruta, hay poca señal, si se llega a cortar es eso”, me dice Seba del otro lado del teléfono. El guitarrista lleva en sus manos una botella cortada de 2.25 litros con suficiente hielo para que hagan el aguante por un par de kilometros. Una espuma generosa de fernet desborda el plástico.
¿Este esfuerzo por tocar constantemente, recorrer continuamente el país es parte esencial de la banda?
La realidad es que sí. Es más, si pudieramos tocaríamos también entre semana más seguido pero es difícil por los laburos de cada uno. Los fines de semana lo disfrutamos mucho, tocamos donde sea que nos reciban amigos y donde el público nos espere con los brazos abiertos.
Son definitivamente una banda de escenario más que de estudio
Sí, definitivamente. Estamos grabando nuestro último disco, pero lo nuestro es el escenario. El disco es una forma de plasmar lo que venimos haciendo, pero el vivo es donde realmente explotamos.
Hablando del nuevo material, ¿qué diferencia tiene con lo anterior?
Mantenemos nuestra crítica social, pero este disco es más mid-tempo, menos thrashero. También los temas son más cortos, antes teníamos canciones de 8 minutos, ¡terrible!
¿La crítica social siempre fue parte del ADN de la banda?
Sí, y también es algo que siempre estuvo presente en el metal. Creemos que es necesario seguir reivindicándolo, especialmente hoy. El metal argento siempre tuvo esa característica, y nosotros queremos mantenerla vigente. Nosotros creemos que este es el camino, que tenemos que seguir llevando ese mensaje en nuestras letras.
¿El público metalero joven en estos tiempos es receptivo a este mensaje o toma distancia?
Nosotros tenemos un público bastante variado. Tenemos gente que nos sigue desde hace años, y también sub-30. Quienes nos siguen conocen bien donde nos paramos ideológicamente. Y hoy más que nunca tenemos que sostener nuestro mensaje porque la cosa está cada vez peor. Los jubilados están derrotados, los laburantes tienen que tener más de un trabajo para llegar a fin de mes. Es una realidad que parece no tener fondo.
Ustedes tiene 14 años de ruedo, ¿pero se siguen considerando una banda emergente?
Creo que podemos coniderarnos tanto una banda emergente como consagrada. Depende el contexto. Lo cierto es que nosotros siempre aspiramos a lo máximo que podemos. Si lo ves así somos emergentes, porque queremos ir a lo más arriba posible. Por otro lado, tenemos una trayectooria suficiente que nos ubica en otro lugar.
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