En la provincia un creciente número de adolescentes está cayendo en las garras de las apuestas en línea, un fenómeno que preocupa a padres, educadores y profesionales de la salud. En este marco, el Estado pampeano presentó en las últimas semanas un programa de abordaje contras las apuestas online y la adicción a los videos juegos. Además, la Fiscalía de Estado realizó una denuncia penal en el Ministerio Público Fiscal para identificar los dichos sitios que funcionan de forma ilegal.
En comunicación con Revista BIFE, el Defensor de Niñas, Niños y Adolescentes, Juan Pablo Meaca, explicó: “Se creó el programa para trabajar con los chicos y las familias y se presentó la denuncia para investigar todas las personas que permiten el acceso a los sitios de apuestas”.
“Es un tema de extrema vulnerabilidad que mueve un montón de dinero, por eso pedimos a los legisladores que regulen esta cuestión porque la participación de niños está prohibido en este tipo de juegos de azar”, completó.
Para entender mejor esta situación, hablamos con quienes están directamente afectados por esta problemática.
María Rodríguez, madre de dos adolescentes, nos recibió en su modesta casa del barrio Villa Santillán de Santa Rosa. “Descubrí que mis hijos estaban apostando en línea cuando empezaron a pedirme dinero cada vez más seguido. Primero pensé que era para cosas normales, pero luego vi que se quedaban despiertos hasta tarde y sus notas comenzaron a bajar”, contó María a BIFE.
Tomás, un joven de 16 años, se contactó con este medio a través de Instagram. Contó que empezó a apostar por “diversión”. “Al principio gané algo de dinero, pero pronto empecé a perder más de lo que ganaba. Intenté dejarlo, pero siempre encontraba una excusa para volver a intentarlo. Perdí la confianza de mis padres y eso es lo que más me duele”, confesó. Su historia es un recordatorio de cómo las apuestas pueden comenzar de manera inocente y escalar rápidamente fuera de control.
BIFE se contactó con la psicóloga Laura Gómez, quien, a través de una llamada telefónica, explicó el impacto de las apuestas en el desarrollo de los jóvenes.
“Los adolescentes son especialmente vulnerables a las recompensas instantáneas que ofrecen las apuestas. El cerebro en esta etapa busca gratificación inmediata, lo que puede llevar a comportamientos adictivos. Muchos de mis pacientes jóvenes no comprenden los riesgos hasta que ya están profundamente involucrados”, explicó Laura.
Además hablamos con un profesor de un colegio de la ciudad, quien prefirió no revelar su nombre. Nos habló sobre las medidas educativas que están implementando. “Hemos comenzado a dar charlas sobre los riesgos de las apuestas en línea y cómo afectan la vida de los estudiantes. También trabajamos en fortalecer su capacidad para tomar decisiones informadas. La idea es prevenir antes que lamentar”.
Más adelante, Lucía, una estudiante de 17 años, nos recibió en el parque Oliver. “Todo empezó como una forma de conseguir dinero extra. Pronto me vi atrapada en un ciclo de apuestas y deudas. Mis padres no entendían por qué siempre necesitaba dinero. Fue un periodo muy difícil”, relató.
Por otro lado, Juan, de 15 años, nos contó su historia en la cancha de fútbol de su barrio. “Mis amigos apostaban en partidos y me decían que era fácil ganar. Al principio gané, pero después perdí mucho. No sabía cómo salir del problema y me daba miedo pedir ayuda”, compartió.
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