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Nadu Bu-Issa: “Tomé clases de canto a los 10 años por iniciativa propia”

By revistabife /

La década que despedimos hace días, nos deja entre otras cosas en el plano musical local, el surgimiento de una de las voces más particulares que tienen los escenarios pampeanos. Una voz que se ha animado (y se anima) a diversos desafíos. Del candombe al flamenco, saltando al blues y el rock para ahora abrazar la inquietud del funk en su nuevo proyecto. Una artista de 25 años que escapa permanentemente de su zona de confort.

¿Cómo fue ese momento en que descubriste tener condiciones para el canto?

No recuerdo un momento exacto, si te puedo decir que en mi casa se escuchaba mucha música negra. Todo el tiempo. Y a partir de ahí, cuando tenía 5 años me empezó a interesar la música y así fui descubriendo mi voz. Tomé clases de canto a los 10 años por iniciativa propia en los talleres que daban en la escuela del barrio.

Las primera formaciones que integraste fueron cuando tenías 15 años. ¿Cómo fue ese proceso de cantar ocasionalmente en juntadas a formar parte de un grupo y pararse frente al público?

Se dio naturalmente, no recuerdo haber tenido ese famoso “pánico escénico”. En las primeras presentaciones con La Cofradía, mi primer grupo, hubo momentos de bastante nerviosismo. Nunca llegué a sentir que me pesase ese proceso de pasar a cantar en juntadas a pasar hacerlo frente al público. De todas maneras, hasta el día de hoy mantengo ese cosquilleo lógico cuando me paro con micrófono en mano en el escenario.

Luego de La Cofradía integraste varios grupos, siempre abarcando distintos géneros. ¿Te costaba adaptarte a las propuestas artísticas de esos proyectos? Sobre todo teniendo en cuenta que generalmente eras la más chica.

No, siempre hice lo que tenía ganas de hacer. Siempre me gustaron los desafíos que traen los nuevos proyectos. Nunca me costó adaptarme a pesar de mi edad. Me ha pasado no estar de acuerdo con ciertos planteos, tanto en el plano musical como en el grupal. A veces hay conexiones que no se dan. Hoy en día no dejo que se desate ningún conflicto porque el diálogo, la comunicación y la comprensión están más presentes en mi.

Podriámos decir que esto último te lo dió la experiencia.

Sí, la postura que tengo hoy en día me la dió la experiencia de haber pasado por diversos proyectos y con gente muy distinta. No sé, por ejemplo, si hoy me toca armar un grupo establezco algunos conceptos. Se que cada musique tiene su toque, no todes tocan igual, y a la hora de invitar a les integrantes pienso en quienes puede llegar a congeniar mejor. Y sobre todo si se trata de una formación para hacer temas propios.

Estuviste durante un tiempo viviendo en Bs. As ¿Cómo fue tu experiencia en cuánto a lo artístico allá?

No tuve la oportunidad de armar una banda en Capital, pero si pude tocar con mi amigo Joni en algunos pubs y bares. Y experimenté junto a el tocar en la calle, estaciones y así poder nutrirme de la diversidad cultural que hay en una ciudad tan grande como Buenos Aires.

Ahora tu presente te encuentra en Les Funkies.

Sí, en un primer momento llegué para reemplazar a Cocó, ya que muy era probable que ella se vaya de la banda porque estaba con muchos proyectos simultáneamente. En primer ensayo ella estaba presente, entonces cantamos las dos juntas y eso estuvo muy bueno. Nos entusiasmamos al pensar cuantas cosas lindas podríamos hacer a dos voces. Fue genial.

En los últimos años hemos vivido algunos cambios y muchas cuestiones se resignificaron. ¿Cómo ves esos cambios en cuanto a las chicas en la escena local, y también a el lugar que se la da hoy a una piba en una banda?

El trato es otro de algún modo. Se puede notar que hay más artistas mujeres en los escenarios locales. Más bandas que son compuestas por pibas. Y tenemos que actuar, conversar, para seguir ganando más espacios. Y dentro de la bandas también es distinto. El trato es otro, y de esto se habla en los ensayos y juntadas. Estamos creciendo.

Últimamente demostraste mucho interés por la pintura, ¿cómo surgió esto?

Siempre me gustó dibujar, pero nunca le dedique el interés que merecía hasta no hace mucho. Hace unos años empecé un taller de pintura y a partir de ahí no paré de pintar, sólo que ahora me lo tomo más seriamente. Estudié artes visuales acá, en Santa Rosa, pero no llegué a terminarla. De todas maneras aprendí muchísimo.

¿Hoy, que pesa más en vos, la música o la pintura?

Últimamente pinto todos los días. Pero si pongo en una balanza las dos artes, pesa más la música.