Fasce pretende seguir en silencio y que su gestión “hable por sí sola”

Un gran revuelo levantó el nombramiento de Juan Pablo Fasce al frente de la subsecretaría de Derechos Humanos en la próxima gestión que asumirá el 10 de diciembre, por haber integrado el gabinete de Juan Carlos Tierno durante los 87 días que duró ese gobierno en la intendencia de Santa Rosa en el 2008.

Lo curioso del asunto es que Fasce actualmente se desempeña como subsecretario General de la Gobernación, y hasta el momento no había recibido ningún tipo de repudio por ejercer en la función pública. Además, cabría preguntarse en este sentido si todos aquellos que tuvieron algún vínculo con el ex intendente y ministro de Seguridad –Juan Carlos Tierno- deberían ser revisados por las agrupaciones que hoy repudian a Fasce.

¿El repudio a Fasce es por su accionar en aquellos convulsionados 87 días del 2008 o por haber integrado un gabinete? Si es por haber integrado un gabinete, ¿cuántos funcionarios deberían estar actualmente en la mira de las agrupaciones que hoy rechazan a Fasce?

No obstante estas preguntas, el Movimiento Pampeano por los DD. HH. y la Asociación Pampeana de Escritores (APE) aprovecharon para reunirse alrededor de una mesa con el objetivo de analizar esta situación: llegaron a la conclusión de que no hay una postura de “confrontar” con el gobierno provincial, al mismo tiempo que desconocieron una vez más al actual subsecretario General de la Gobernación. La próxima reunión del MPDH y APE que coordinaron para revisar su nombramiento, será el lunes 2 de diciembre.

En el ínterin, el gobernador electo Sergio Ziliotto, al responder sobre este tema, dijo que “una persona no hace a la política de gobierno de Derechos Humanos”, mientras que Daniel Bensusán (ministro de Gobierno, Justicia y Derechos Humanos) salió a respaldarlo al afirmar que seguirán trabajando para que “los Derechos Humanos sean una política de Estado”.

En este contexto, Revista BIFE se comunicó con Juan Pablo Fasce para conocer su opinión del tema, y su postura acerca de lo que debería hacerse en su área. Sin embargo, en río revuelto no quiso dar declaraciones públicas porque sus “superiores” lo están haciendo. Además, aclaró que cada uno tiene derecho a opinar y a realizar el análisis que considera correspondiente, aunque se manifestó “muy tranquilo” esperando a que su gestión “hable por sí sola”.