“Por razones de índole personal, que dificultarían su vinculación y el sostenimiento de su vida familiar”. Esas fueron las palabras del hombre que abandonó, el martes pasado en la Comisaría de la Mujer y de la Familia de Bahía Blanca, a dos niños africanos.
En agosto de 2019, Eduardo Rucci y Natacha Perrig viajaron a Guinea-Bisáu para adoptar a los hermanos. Recién en enero de este año, el matrimonio, los dos niños (6 años) y la hija biológica (11 años) se mudaron al barrio Villa Vega, en San Martín de los Andes. Buscaban una vida más tranquila y lejos de Bahía Blanca.
Pese a que eran reconocidos en la comunidad como padres amorosos, desde que se supo que abandonaron a sus hijos en la comisaria, nadie sabe sobre ellos. Se borraron de las redes sociales ni tampoco atienden el teléfono. Mientras tanto, la Justicia investiga al matrimonio por haber traído irregularmente a los menores al país.
En la denuncia, desde el equipo de la Comisaría indicaron: “Tras el abandono de los mismos, regresó a su localidad de residencia en San Martín de los Andes, lo que muestra y deja a la vista la vulneración de derechos a la cual quedan expuestos estos hermanos, quienes ya fueron alejados de su país natal, con todo lo que eso implica, en relación a cambios culturales y costumbres cotidianas”.
“Un día, ambos progenitores, luego de hacer alardes mediante las redes sociales de lo excelentes personas que son al adoptar a dos niños africanos, se cansan de ellos, viajan desde San Martín de los Andes para entregarlos a una institución policial como si fueran un paquete o carga, quedando los niños a la espera de que ‘papá vuelva a buscarlos’ (sic), siendo ello un acto inhumano, cruel, discriminatorio, racista y totalmente perjudicial para los niños, violatorio de nuestro ordenamiento civil, penal, como así también de la Convención sobre los Derechos del Niño, ley 13.298 y 26.061″, describe el documento.
Para que la causa avance, la Justicia necesita información de la Dirección Nacional de Migraciones para saber si la adopción se hizo legalmente. Desde que llegaron a la comisaría, los niños están bajo “medida de abrigo”, esto implica que fueron trasladados a un hogar municipal.